¿Necesitas ayuda? Llámanos al 967 225 863
de BUTTIGLIONE, ROCCO
de BUTTIGLIONE, ROCCO
En la época moderna se han desarrollado con enorme profusión ensayosde carácter económico, social, histórico, teológico, antropológico,etc., sobre el trabajo humano, sobrepasándose, en muchas ocasiones, el concepto exacto del trabajo. La Iglesia católica ha participado eneste quehacer, intentando a veces contenerlo, pero nunca hacomprendido ni amado el trabajo industrial. Los católicos se hansentido alejados, en cierto sentido, de la importantísima tarea social de producir riqueza, la han mirado con recelo. La invención de nuevas formas de organización del trabajo humano y de innovaciones en elmundo de producción se han dejado para otros, burgueses o marxistas.Con la Laborem Exercens la Iglesia va más al fondo, llega al corazóndel concepto mismo del trabajo humano. En lugar de trazar un modeloideal, Juan Pablo II ayuda a comprender lo que ha acontecido y sigueaconteciendo en la historia, de qué modo puede el hombre transformarse con su trabajo, hacerse más hombre.