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de ORTEGA CAMPOS, PEDRO
de ORTEGA CAMPOS, PEDRO
Hay dos clases de libros geniales que en el mundo se han escrito: losque preguntan y los que responden. La Biblia en general y losevangelios en particular son doblemente geniales: porque hacenpreguntas y porque responden, incluso cuando guardan silencio!¿Qu hay en una pregunta? Todo. Es la manera de evocar la respuestaestimulante o de aniquilar la indagaci¢n, es el meollo mismo de laense¤anza-educaci¢n. El fin del conocimiento no es descubrir elsecreto del mundo, sino dialogar con l. En esta obra se aportansugerencias y comentarios, no explicaciones terminantes. El libro est dividido en dos partes. En la primera se constata c¢mo la preguntab¡blica contiene una riqueza educativa para la fe. No es un merorecurso literario, sino una llamada al ser humano que busca un sentido en su vida y encuentra al Se¤or. Es una conversi¢n. Seguidamente, elvalor religioso de la pregunta en el Antiguo Testamento. Despus secontempla a Jes£s como modelo del preguntar, Maestro que preguntasiguiendo su tradici¢n jud¡a, as¡ como sus actitudes y clases depreguntas, y desde luego la pregunta evanglica como «promesa»cumplida en l. Finalmente se apostilla con ayuda filos¢fica ladefinici¢n y relevancia de la pregunta, sus condiciones en lasdistintas etapas de la vida, su valor magisterial y de escucha sinprejuicios, fuente de di logo y venero de catequesis y de oraci¢n. Enla segunda parte del libro se encuentra una £til base de datos de laspreguntas en los evangelios: miradas en su conjunto producen luces ysentimientos tan dispares y a la vez complementarios, seg£n contenidos e interlocutores!
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