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de BENÍTEZ FLORIDO, RUBÉN
de BENÍTEZ FLORIDO, RUBÉN
Cada d¡a nos cruzamos con centenares de rostros an¢nimos de los quenada sabemos y que pasan a nuestro lado camino de alg£n sitio comosombras fantasmales, en las aceras de calles y avenidas, en lasparadas del autob£s y del metro, en la colas de los bancos y lossupermercados, en los ascensores, en las consultas de los mdicos, enlos parques.Pero lo m s impactante y aterrador es descubrir que no menosfantasmales somos cada uno de nosotros, que nos dejamos enga¤ar poreste entramado de consistencia y perdurabilidad que aparenta ser larealidad. Basta observar los zapatos y la ropa que ya no usamos desdehace tiempo, o pasar distra¡damente las p ginas de una agenda antiguay olvidada, para darnos cuenta de la ef¡mera y leve vida de fantasmasque hemos tenido. Y peor a£n, de lo que podr¡amos haber sido y yanunca m s tendremos la oportunidad de ser. Por eso resulta conveniente no concederle ninguna tregua al olvido.
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